Actualizado 22/01/2007 22:10

México.-Nuestras Hijas de Regreso a Casa, premio Abogados de Atocha para que no se olviden los crímenes de Ciudad Juárez

El galardón pretende contribuir a la memoria y mantenimiento del recuerdo de los asesinados hace 30 años en Madrid

TOLEDO, 22 Ene. (EUROPA PRESS) -

El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, hizo entrega hoy del III premio Internacional Abogados de Atocha que otorga el Gobierno de Castilla-La Mancha a la asociación 'Nuestras Hijas de Regreso a Casa' de Ciudad Juárez (México), que lucha contra la impunidad de asesinatos de mujeres cometidos en Chihuahua, "para que no se olvide y no se oculte lo que allí sucede", en una muestra de solidaridad y para recordar que "aquello está sucediendo".

En un acto que se celebró en la iglesia de San Pedro Mártir de Toledo, en el que participó también el presidente de la Fundación 'Abogados de Atocha', Alejandro Ruiz Huerta, el presidente regional agradeció a los familiares, amigos e integrantes de 'Nuestras Hijas de Regreso a Casa' su labor puesto que "hacéis que podamos confiar algo en el género humano".

Lamentó que el hecho de ser mujer, joven y pobre sean razones suficientes para que se cometan los asesinatos, confesando no conocer "mayor barbaridad e injusticia" que el hecho de que se acabe con personas de esa manera "por esas condiciones". Recordó en este sentido que la condición humana y la dignidad de la persona afectan por igual a hombres y mujeres, y este es un principio "que debemos saber proclamar y defender en todos los ámbitos".

Tras recordar cómo siguen dándose muestras de violencia de género y manifestaciones de machismo que tienen como consecuencia la muerte, --como ayer en concreto en Miguelturra (Ciudad Real), donde falleció una mujer presuntamente a manos de su ex marido--, y después de recordar al fallecido Miguel Saavedra, superviviente de la masacre de Atocha, se refirió Barreda a la reflexión de una joven pobre de Somalia, que reclama un Estado capaz de protegerla y asegurar su dignidad y "unas condiciones de vida mínimas para ella, su familia y su pueblo".

Cuando se vive en una de las zonas más privilegiadas del planeta, hay que recordar que en algunos lugares se echa de menos una organización mínima que asegure la dignidad, dijo, y recordó que junto a nosotros se cometen asesinatos de género, por lo que "hay mucho que hacer en nuestra ciudad, nuestro barrio y nuestras calles", por lo que hay que ser "comprometidos con todos los seres humanos vivan donde vivan".

RECUERDO DE ABOGADOS DE ATOCHA "VIVO"

Barreda, que recordando al poeta Luis Cernuda se refirió a uno de sus versos: 'Recuérdalo tú, y recuérdalo a otros", destacó que después de 30 años, los que se cumplen el próximo día 24 del asesinato de los abogados de Atocha, permanecen "vivos" en la memoria.

De este modo, todos los españoles "debemos mantener nuestro agradecimiento y tener viva la memoria, lo recordaremos y se lo recordaremos a otros". Así, este premio es una manera de contribuir a la memoria y al mantenimiento de un recuerdo que es obligado y necesario tener sobre acontecimientos relativamente recientes que "todos" tienen que tener en cuenta.

Se mostró seguro de que la "lección" de los Abogados de Atocha, "está ahí", en su testimonio como luchadores por la libertad y la democracia, en un momento difícil y crítico del pasado más reciente. Al repasar las imágenes de aquellos días, "me sobrecoge hoy también". "Yo estaba allí", continuó, y también todos los demócratas españoles, luchadores por la democracia y la libertad.

Así, dijo que hace 30 años era muy importante cómo se resolviera esa "crisis" de los Abogados de Atocha, y se hizo, según Barreda, "con un ejemplo de civismo" y comportamiento democrático que llevo cosas "salieran bien y lo antes posible". El sueño de los Abogados de Atocha de "una mejor España" es ahora "una realidad" consecuencia del compromiso, militancia y trabajo de "muchos".

ALIENTO EN EL CAMINO DE LA DEFENSA DE LA VIDA

Carla Michel Parras, en nombre de la asociación, recogió un premio que, a su juicio, sirve para festejar, buscar la vida y la libertad de las mujeres y este reconocimiento a la lucha incansable de familiares desaparecidas, es un aliento en el camino de la defensa de la vida y libertad de las mujeres. Es imprescindible ser personas, dijo, "y las mujeres es lo que exigimos".

Lamentó los femicidios a niñas y mujeres "por el solo hecho de serlo" y por parte de asesinos en serie o individuales, parejas, parientes, novios, compañeros de trabajo o anónimos y grupos de mafiosos. Todos, indicó, tienen en común enviar el mensaje de que las mujeres son "usables y desechables". En estos crímenes, hay mezcla de factores culturales, económicos y políticos, por lo que se da una doble discriminación, ya que a la condición de mujer se une el origen humilde de las desaparecidas.

Ciudad Juárez es señalada, recordó, como ejemplo típico de delitos de caracter sexista. La mayor parte de los 400 asesinatos de mujeres no han sido resueltos y los asesinos viven libres y no ha habido reparación del daño. No se han cumplido las recomendaciones internacionales, criticó, y por eso, insistió en que "la razón nos asiste y la justicia es un bien exigible".

Por su parte, el presidente de la Fundación Abogados de Atocha recordó para que los que murieron por la libertad y la democracia, y que "forman ya las señas de identidad de la nuestra". Ruiz Huerta tuvo palabras para Luis Ramos Pardo, superviviente que falleció en 2005, y sobre todo, para "mi hermano mayor, Miguel Saravia", que falleció ayer.

Hay que mantener viva, insistió, la luz de Atocha, trabajar por la paz y en este sentido, el premio a las 'Nuestras Hijas de Regreso a Casa' es el reconocimiento de la vinculación en la lucha por la libertad, que "nos une". Ojalá todo suponga renovar esfuerzos colectivos para trabajar por la libertad humana porque no puede haber otro objetivo en la vida, destacó.

MINUTO DE SILENCIO

La consejera de Cultura, Blanca Calvo, que abrió el acto, destacó que en un día de celebración, el "luto se mezcla con el júbilo" tras la muerte ayer de uno de los supervivientes de los asesinatos de Atocha, Miguel Saravia, y de una mujer asesinada en Miguelturra (Ciudad Real). En la memoria de ambos, y en la de las mujeres que siguen desapareciendo en Ciudad Juárez, se guardó un minuto de silencio.

El premio 'Abogados de Atocha' se constituyó en 2002 por el Gobierno de Castilla-La Mancha, y coincidiendo con el 25 aniversario de los asesinatos, para honrar la memoria de cinco hombres "sagrados", los asesinados en su despacho de la calle Atocha el 24 de enero de 1977, y los cuatro supervivientes de la masacre en el despacho laboralista de CC.OO.

El poeta Vidal de Nicolás, presidente del Foro de Ermua, recibió el premio en su primera edición en el año 2002, mientras que el dominico brasileño Frei Betto, impulsor del programa 'Hambre Cero' en Brasil, recibió el galardón en su segunda edición.