Actualizado 15/05/2016 17:16

México pone fin a siete años de luto por el caso ABC

Incendio Sonora
REUTERS

   CIUDAD DE MÉXICO, 15 May. (Notimérica) -

   Un juez federal mexicano ha decretado penas de entre 20 y 29 años de prisión a 19 de los 22 implicados en el incendio de la Guardería ABC, en la ciudad de Hermosillo (capital del estado de Sonora), que provocó la muerte de 49 niños y dejó decenas de heridos, el 5 de junio de 2009.

   La justicia mexicana ha condenado a 19 exfuncionarios públicos y empleados del centro por los cargos de homicidio involuntario --o negligente-- y de lesiones culposas. El caso levantó la polémica en el país hace siete años y reveló toda una trama de irregularidades en los centros de cuidado de menores concesionados por el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).

   Según ha detallado CNN, el Consejo de la Judicatura Federal ha señalado que los funcionarios son "penalmente responsables" por los delitos de homicidio contra 49 niños y por las lesiones agravadas cometidas contra 38 menores y cinco mayores de edad.

   Entre los culpables de la tragedia se encuentran la responsable del departamento de Guarderías, el delegado estatal del Instituto Mexicano del Seguro Social y el secretario del consejo de administración de la Guardería ABC, así como el director de Protección Civil del municipio y el director de Bomberos de la ciudad.

   La jefa del departamento de Guarderías ha sufrido la mayor condena --de 29 años de prisión y una multa--, seguida del delegado estatal en Sonora del Instituto Mexicano del Seguro Social, el director de Protección Civil y el titular Unidad Estatal de Protección Civil, que deberán cumplir 28 años de cárcel cada uno.

SIETE AÑOS DE LUTO

   El pasado 5 de junio de 2009, se originó un incendio en el departamento de Control Vehicular del gobierno del estado de Sonora, que se propagó por las instalaciones del centro de cuidado infantil ABC.

   El fuego llegó hasta el centro cuando decenas de bebés y niños se encontraban durmiendo la siesta. La guardería no contaba con salida de emergencia y la única forma de evacuar el recinto era a través de la puerta principal.

   El recinto tampoco contaba con un sistema contra incendios, ni con extintores. Además, los profesionales no estaban formados contra las emergencias y las alarmas de humo no funcionaban. Según las declaraciones de uno de los funcionarios, recogidas por 'BBC Mundo', "la guardería era una bomba de relojería".