Actualizado 29/08/2009 00:51

Muerte Jackson fue homicidio, posible cargo criminal

LOS ANGELES, EEUU (Reuters/EP) - La muerte de la estrella de la música pop Michael Jackson fue dictaminada como un homicidio por sobredosis de propofol y otros medicamentos, un caso que la policía referirá a fiscales para posibles cargos criminales, informaron el viernes funcionarios.

El departamento forense del condado de Los Angeles dijo en un comunicado que el propofol, un poderoso anestésico, y el sedante lorazepam fueron principalmente las drogas responsables de la muerte de Jackson. Otros medicamentos detectados en su sistema fueron midazolam, diazepán, lidocaína y efedrina.

Por otra parte, el departamento de Policía de Los Angeles dijo que su investigación sobre el deceso del cantante de música pop sucedida el 25 de junio está en proceso, pero que están refiriendo el caso a fiscales para que evalúen posibles cargos criminales.

El reporte forense marcó la primera declaración oficial acerca de que la muerte del cantante fue un homicidio.

La lista de medicamentos detectados en el cuerpo de Jackson refleja una especie de coctel de sedantes, analgésicos y un estimulante. El midazolam es un sedante similar al propofol, usado para que pacientes queden en estado de somnolencia, pero no inconscientes, durante procedimientos como colonoscopías.

El diazepán, la versión genérica de Valium, es utilizado para calmar la ansiedad, mientras que la lidocaína es un analgésico y la efedrina, un estimulante.

El forense dijo que el reporte toxicológico completo permanece en reserva a pedido del Departamento de Policía de Los Angeles y de la fiscalía del condado de Los Angeles.

Los funcionarios lanzaron la investigación sobre las circunstancias que rodearon la muerte del cantante de "Thriller", quien sufrió un paro cardíaco en su mansión de Los Angeles.

La investigación se ha centrado en las drogas que Jackson tenía en su cuerpo y en varios médicos que cuidaban al cantante cuando murió, particularmente su doctor personal Conrad Murray.

Las órdenes utilizadas para registrar la oficina de Murray sugirieron que el profesional es objeto de una investigación de homicidio.