Publicado 29/06/2015 22:00

Uno de los normalistas fue torturado antes de morir, no atacado por un perro

Women shout slogans and hold posters with pictures of the 43 missing students fr
JORGE LOPEZ / REUTERS

   MÉXICO DF, 29 Jun. (Notimérica) -

   El Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) ha relevado que uno de los normalistas asesinados en Iguala, Julio César Mondragón, presentaba señales de tortura previas a su fallecimiento, desechando la posibilidad de que sus lesiones fueran provocadas por un animal, como aseguró la Procuraduría General de la República (PGR), de acuerdo con 'Red Política'.

   Durante una rueda de prensa, los expertos aseguraron que el cadáver de la víctima presentaba fracturas craneales y hematomas en la parte trasera del abdomen, lesiones que le provocarían la muerte, y no el supuesto ataque de un perro.

   Un miembro del GIEI, Carlos Beristain, declaró que "lo que es evidente, si me preguntan por el caso de Julio César Mondragón, es que él fue objeto de torturas con fractura craneal con lesiones internas, tanto en pulmón como hematomas que le provocaron la muerte", tal y como señala la autopsia.

   Asimismo, Beristain agregó que cuentan con las pruebas suficientes de la escena del crimen para realizar una evaluación detallada, tanto de las autopsias como de los resultados de las mismas.

   Julio César Mondragón es el normalista que dejó una carta de despedida a su mujer. La carencia de oportunidades educativas en el Distrito Federal donde trabajaba, hizo que Mondragón se trasladara a Guerrero persiguiendo su sueño de ser profesor, como su mujer, Marisa Mendoza, con la que tenía una hija en común.