Manifestaciones en Nicaragua
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   MADRID, 7 May. (EUROPA PRESS) -

   Policías antidisturbios han cargado contra los manifestantes que participaron el domingo en una nueva protesta contra el Gobierno de Daniel Ortega en las localidades nicaragüenses de Catarina y Niquinohomo, a pesar de que la ola de violencia parecía haber concluido con la promesa de un diálogo nacional.

   Cientos de personas se manifestaron en la vecina Monimbó, también en el departamento de Masaya, a unos 40 kilómetros de Managua. A su regreso, la caravana de autobuses en la que se desplazaban fue atacada por grupos 'sandinistas' a la altura de la carretera que une Catarina y Niquinohomo. Los agentes intervinieron lanzando gases lacrimógenos y balas de goma, de acuerdo con el diario nicaragüense 'La Prensa'.

   Los habitantes de dichas localidades, al enterarse de los disturbios, se acercaron al lugar de los hechos para socorrer a sus vecinos. Sin embargo, según el rotativo local, la Policía les cortó el paso y cargó contra ellos usando los mismos medios. Esto desató un nuevo enfrentamiento en el que vecinos y manifestantes levantaron barricadas incendiadas y lanzaron piedras y cócteles molotov contra los agentes.

   "Reprensión violenta de antimotines y turbas esta noche contra manifestantes en los municipios de Catarina y Niquinohomo", denunció en Twitter el obispo auxiliar de Managua, Silvio José Báez, que ha ejercido de portavoz de la Conferencia Episcopal nicaragüense, llamada a mediar en el diálogo nacional.

   Las protestas comenzaron en abril con la reforma de la seguridad social como detonante pero se extendieron rápidamente entre la población ampliando el pliego de demandas. Fueron duramente reprimidas por las fuerzas de seguridad, con un saldo de más de 40 muertos y decenas de heridos y detenidos.

   Ante la crítica interna e internacional por la desproporción en el uso de la fuerza, Ortega anunció un diálogo nacional que contará con la mediación de la Conferencia Episcopal, aunque todavía no se ha establecido un calendario ni se han pactado los temas a tratar.

   La oposición, los manifestantes y los propios obispos han fijado como prioridad de este diálogo nacional la "democratización" de Nicaragua. La vicepresidenta y primera dama, Rosario Murillo, ratificó el pasad viernes la "absoluta disposición" del Gobierno a negociar "sin limitaciones" y "con el corazón abierto".

   Entretanto, el mismo domingo los miembros de la Comisión de la Verdad creada por el Parlamento, que controla el oficialismo, tomaron posesión del cargo. La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ha expresado sus dudas sobre la fiabilidad de estos investigadores y ha anunciado que se mantendrá vigilante.