CIUDAD EL VATICANO, 20 Feb. (Notimérica) -
El Papa Francisco ha afirmado que "pagar salarios en negro es un pecado gravísimo" y que los cristianos, especialmente en tiempo de Cuaresma, que lo realizan y luego ofrecen donativos a la Iglesia están utilizando "a Dios para encubrir la injusticia", en la misa matutina celebrada este viernes en la capilla de la Casa de Santa Marta en el Vaticano.
Jorge Bergoglio ha comenzado su reflexión con la siguiente observación sobre la primera Lectura: "Ayunar no es no comer carne el viernes, hacer alguna cosita y después fomentar el egoísmo, la explotación al prójimo e ignorar a los pobres".
Así ha invitado a los presentes a preguntarse cómo es su relación con los trabajadores a su cargo:
"Se puede tener tanta fe, pero si no obras para qué sirve. De este modo, a quien va a misa todos los domingos y toma la comunión, se le puede preguntar: '¿Y cómo es tu relación con tus empleados? ¿Les pagas en negro? ¿Les pagas el salario justo? ¿También depositas las contribuciones para la jubilación y el seguro sanitario?'".
El Papa ha proseguido con una crítica hacia aquellos cristianos que envían donativos a la Iglesias, pero que con quienes están a su cargo - "ya sean hijos, abuelos o empleados"-, no se es justo.
"Tú no puedes hacer ofertas a la Iglesia sobre los hombros de la injusticia que haces con tus empleados. Este es un pecado gravísimo: es usar a Dios para cubrir la injusticia". Y añade: "No es un buen cristiano".
El pontífice ha diferenciado entre quienes tienen un seguro médico y son atendidos en el hospital inmediatamente ("Es una cosa buena, da gracias al señor") y aquellos que no tienen esta relación social con el hospital, de modo que cuando llegan deben esperar seis, siete u ocho horas, "incluso por una cosa urgente".
Finalmente, ha concluido con un llamamiento a "abrir el corazón en tiempo de Cuaresma para quien se haya equivocado y esté en la cárcel". Esta petición ha ido acompañada de un rezo para que "el Señor les ayude a una profunda renovación del Espíritu".