ROMA, 22 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Papa ha reivindicado para Europa la "unidad fraterna" que "soñaron los padres fundadores", en línea con el mensaje de su oración del pasado lunes, cuando instó a los políticos a buscar la unidad así como el bien común, dejando de lado los intereses partidistas.
"En este tiempo en el cual es necesaria tanta unidad entre nosotros, entre las naciones, oremos hoy por Europa, para que Europa logre tener esa unidad, esa unidad fraterna que soñaron los padres fundadores de la Unión Europea", ha señalado durante la misa de Santa Marta.
En la celebración matutina de esta misa, celebrada en la capilla de su residencia, Francisco ha continuado con su reflexión sobre el pasaje evangélico que narra el encuentro nocturno entre Jesús y Nicodemo que ha definido como "un verdadero tratado de Teología".
Así, Francisco ha señalado que el texto habla tanto del amor "con locura" de Dios, como de la "ceguera del pecado". Sobre lo primero, ha destacado que la imagen de Jesús crucificado "no es un adorno más o menos bonito o con valor artístico". "Es precisamente la expresión del amor de Dios. Dios nos amó de esa manera", ha remachado.
La segunda clave de interpretación elegida por el Pontífice ha sido la imagen de la luz que viene al mundo y es rechazada por las tinieblas, tan importante en el Evangelio de San Juan. Para el Papa, hay muchas personas que son "murciélagos humanos" porque "solo saben moverse de noche" ya que "la luz los deslumbra".
Y ha añadido: "También puede ocurrirnos a nosotros mismos cuando estamos en pecado. La luz nos abofetea, nos hace ver lo que no queremos ver". Para el Papa lo peor de esta situación es que, si se acostumbran a ella, "los ojos del alma terminan ignorando lo que es la luz".
Por eñño ha instado a los cristianos a no ser "murciélagos humanos" que prefieren la oscuridad porque están acostumbrados al pecado y les ha pedido que dejen que el amor de Dios entre en ellos y les "ayude a ver las cosas con la luz de Dios".
En este punto, ha puesto como modelo a tantos cristianos que "pasan su tiempo mirando el crucifijo... y allí encuentran todo, porque han comprendido, el Espíritu Santo les ha hecho comprender toda la sabiduría cristiana".
Citando a San Pablo, Francisco ha apuntado que "el razonamiento humano es útil hasta cierto punto". "Pero el verdadero razonamiento, la más bella forma de pensar, pero también que más explica todo, es la cruz de Cristo: Dios aniquilado, humillado por amor", ha concluido.