LIMA, 10 Ago. (EUROPA PRESS) -
El 79 por ciento de los estudiantes de entre 12 y 17 años en Lima, la capital de Perú, ha pensado en algún momento la posibilidad de suicidarse porque considera que su vida no tiene sentido, y el 28 por ciento tiene depresión, según se desprende de un estudio presentado hoy por el Instituto Guestalt de Lima (IGL).
Uno de los principales problemas para prevenir el suicidio es que los síntomas de la depresión pasan desapercibidos para el entorno más cercano del niño, como son los padres de familia y los profesores, según afirma el psicólogo Manuel Saravia Oliver, autor del estudio 'Depresión y Suicidio en escolares de Lima Metropolitana'.
"Resulta alarmante que por ignorancia y desinformación no podamos detectar precozmente cualquier alteración o síntoma de depresión de los escolares", subraya Saravia Oliver, que añade que los alumnos piensan en el suicidio como una salida rápida para poder solucionar sus problemas.
Por eso, el psicólogo no tiene reparos en decir que el suicidio es un grave problema de salud mental en Perú. Y para ilustrarlo, Saravia Olivier recuerda que el año pasado se registraron más de 50 suicidios infantiles y qye en lo que va de 2007 ya asciende a más de 40 casos, según informa la prensa local, recogida por Europa Press.
"Del total de suicidios que se realizan cada año, entre el 13 y 15% corresponden a menores de edad debido a que en el 75% de los casos no se diagnostica ni atiende oportunamente un problema de depresión. Es importante destacar que existe una relación directa entre depresión y suicidio", explica el psicólogo.
El experto revela que los niños y adolescentes pueden optar por el suicidio debido a muchos factores, principalmente por los conflictos familiares, violencia física y psicológica, así como la presión que los padres ejercen sobre ellos para que tengan un rendimiento escolar y académico positivo.
En este sentido, el especialista dice que ese tipo de situaciones ocasiona una depresión profunda en el niño o adolescente, además de cuadros de ansiedad, entre otras manifestaciones y trastornos psicológicos, los cuales requieren de ayuda profesional inmediata para evitar desenlaces lamentables
Por tal motivo, el psicólogo pidió a los padres de familia estar atentos ante algunas señales de conducta que podrían revelar una intención suicida en sus hijos, tales como depresión, alteraciones en el sueño y el apetito, dolencias físicas, irritabilidad y un desinterés general.
"Hay que estar muy atentos a los cambios de conducta e identificar la depresión infantil. Se dan casos, por ejemplo, donde el niño no quiere comer o come demasiado, se desinteresa por cosas que antes le llamaban la atención o lloran sin motivo", añade, tras destacar la necesidad de una comunicación constante entre padres y profesores.
La depresión es una enfermedad muy extendida que presenta síntomas tanto emocionales como físicos, como tristeza, ansiedad, incapacidad por experimentar placer y desesperanza, así como dolor de cabeza, de pecho, de espalda, de extremidades e incluso, problemas gastrointestinales.