Actualizado 04/02/2010 21:45

Perú.- Perú construirá en 60 días como máximo las viviendas que entregará a los damnificados por el temporal en Cuzco


LIMA, 4 Feb. (EUROPA PRESS) -

El presidente del Consejo de Ministros de Perú, Javier Velásquez Quesquén, informó este jueves de que el Gobierno pretende construir en un plazo máximo de 60 días las viviendas proyectadas para los damnificados por el fuerte temporal que azotó a finales de enero la región de Cuzco y acabó con la vida de ocho personas.

"La decisión política tomada por el presidente de la República es que vamos a entregarle un módulo habitacional a cada damnificado, no solo en Cuzco, sino también en Puno, Huancavelica, Ayacucho y Apurímac", dijo Velásquez a su salida de una reunión con los alcaldes de los municipios afectados, al tiempo que anunció que el Estado correrá con los gastos de dichas construcciones.

En este encuentro, el político peruano solicitó a las autoridades estatales, regionales y municipales que determinen con la mayor brevedad posible las zonas más seguras para levantar las nuevas viviendas y evitar que vuelvan a derrumbarse con un nuevo temporal. "No podemos construir en las mismas zonas de peligro", indicó.

El presidente del gabinete ministerial señaló que independientemente de la procedencia de los terrenos, estatal o municipal, es necesario determinar "a lo largo del día" las zonas donde se edificarán las casas, con el fin de agilizar los trámites correspondientes y realizar los planes de saneamiento del lugar.

En materia económica, el presidente regional de Cuzco, Hugo Gonzales Sayán, informó de que las pérdidas generales rozan los 680 millones de nuevos soles (172 millones de euros), de los cuales cerca de 100 (25,3 millones de euros) corresponden a la provincia de Cuzco, mientras que el resto se reparten entre localidades colindantes.

Uno de los sectores más afectados ha sido el agrícola. Las fuertes rachas de viento y lluvia devastaron 160.000 hectáreas de cultivo que se traducen en pérdidas de 26 millones de nuevos soles (6,6 millones de euros) y otros 54 (13,7 millones de euros) por la destrucción de los sistemas de riego, lo que ha llevado al Gobierno a destinar 40 millones de nuevos soles (10 millones de euros) a la recuperación del sector que no serán suficientes, por lo que las administraciónes locales deberán afrontar el resto.

Otras de las áreas perjudicadas es el turismo, que se ha visto afectado por la destrucción parcial de la ciudadela de Machu Picchu, patrimonio de la humanidad y uno de los principales atractivos del país, que ha paralizado la actividad de 17.000 trabajadores del sector. Con el fin de reactivarlo, el Gobierno ha puesto en marcha una campaña de promoción internacional del turismo en Perú para dar a conocer otros destinos nacionales.

En lo que se refiere a las comunicaciones, las intensas precipitaciones provocaron deslizamientos de terreno que bloquearon y rompieron parcialmente las vías de acceso a la provincia. La empresa que explota la línea ferroviaria hasta Machu Picchu se comprometió a ofrecer un servicio de autobuses desde Santa Teresa hasta la zona hidroeléctrica desde donde se puede coger el tren hacia la ciudadela.