Actualizado 23/02/2016 05:25

Petroperú evalúa un viejo oleoducto tras los derrames de crudo en la selva amazónica

Petróleo en Perú
PETROPERU


LIMA, 23 Feb. (Reuters/EP) -

La estatal Petroperú ha dicho este lunes que en dos meses tendrá la evaluación del estado de un viejo oleoducto para evitar roturas tras dos recientes derrames de 3.000 barriles de crudo en la selva amazónica, que afectaron a varias comunidades y paralizaron el bombeo.

Los derrames en el Oleoducto Nor Peruano se produjeron en enero y febrero en dos zonas de la Amazonía y contaminaron al menos dos ríos, según las autoridades, que decretaran una emergencia sanitaria para vigilar el abastecimiento de agua para consumo humano.

Germán Velásquez, presidente de la compañía, ha explicado a Reuters que la empresa ha iniciado el registro de áreas sensibles del oleoducto a través de un "raspatubo geométrico", un instrumento que permite medir y analizar el estado de la tubería.

"Una vez que pasa el raspatubos, que puede demorar hasta dos meses, allí vamos a tener con certeza el grado de fiabilidad del oleoducto", ha agregado el funcionario.

Mientras tanto, el transporte en el oleoducto --que se había reducido hasta 5.000 o 6.000 barriles por día por una menor producción en el principal lote del país--, permanecerá detenido.

VARIOS RÍOS CONTAMINADOS

El crudo derramado contaminó los ríos Chiriaco y Morona, en el noroeste del país, y afectó el suministro de agua de al menos ocho comunidades nativas Achuar, denunció Edwin Montenegro, dirigente indígena de los pueblos que viven en la zona.

Petroperú deberá hacer frente a una multa de unos 60 millones de soles (17 millones de dólares) si se confirma que los derrames afectaron la salud de la población local, tal y como ha detallado el regulador ambiental de Perú, OEFA.

Petroperú opera el oleoducto y también refina petróleo que transporta. La tubería, construida en la década de 1970, bombea crudo mayormente del Lote 192, operado por Pacific Exploración y Producción Corp.

Velásquez ha indicado que ninguna de las dos empresas ha declarado fuerza mayor por la interrupción del transporte del crudo.

Las lluvias estropearon los esfuerzos iniciales de Petroperú para contener los derrames del crudo, que se había almacenado en muros de contención. "El oleoducto está podrido. La gente quiere que se cambie", afirmó Montenegro. Imágenes de televisión han mostrado partes de la selva amazónica manchada por un lodo negro y equipos de limpieza sacando baldes de petróleo de los ríos.

Los derrames ocurren en momentos en que Petroperú se prepara para volver a producir crudo con un socio privado después de más de dos décadas, cuando fue privatizada parte de su operación. La compañía estatal también tiene planes de poner en venta hasta un 49 por ciento de sus acciones en la bolsa de Lima.