Actualizado 08/04/2015 19:09

Policía confiesa que mató al niño de diez años del Complexo do Alemão en Brasil

Miembros de la Policía Militar de Brasil.
Foto: REUTERS

RÍO DE JANEIRO, 8 Abr. (Notimérica) -

   Un miembro de la Policía Militar (PM) de Río de Janeiro ha confesado ser el autor del tiro que acabó con la vida del niño Eduardo de Jesus Ferreira, de diez años, el pasado jueves en el Complexo do Alemão, dando así la razón a la madre y a los vecinos, que desde el primer momento acusaron a los policías de la Unidad de la Policía Pacificadora (UPP).

   Según la prensa local, uno de los policías aseguró este martes en declaraciones a la comisión que investiga el caso que, por su posición en aquel momento, cree haber sido el autor del disparo. Después de prestar declaración el policía tuvo un brote psicótico y tuvo que ser ingresado momentáneamente en el Hospital Central de la PM.

   La Policía Civil, por su parte, ha informado que dos de los once policías que han prestado declaración han dado informaciones contradictorias sobre la operación, sobre todo en lo que se refiere a una supuesta recogida de cápsulas de bala, algo que han denunciado algunos testimonios y que en caso de confirmarse podría acarrearles penas de hasta dos años de cárcel.

   La muerte del niño Eduardo Jesus Ferreira y de una mujer de 41 años, Elizabeth de Moura Francisco, ha elevado la tensión en el Complexo do Alemão, un gran conjunto de favelas donde viven alrededor de 70.000 personas.

   La PM ha instalado una nueva cabina blindada en la localidad conocida como 'Inferno Verde' y 60 de los 120 policías de Nova Brasília, donde murió el niño, acaban de empezar un curso de entrenamiento en técnicas de "abordaje, tiro y progresión en el terreno", según ha informado la propia Policía.

   Los ánimos están muy caldeados entre los vecinos, cansados de la violencia policial y de la impunidad con que actúan quienes deberían protegerles. Por eso, tras las marchas espontáneas que se produjeron la semana pasada este miércoles por la tarde hay prevista una manifestación que partirá hacia el Palacio de Guanabara, sede del Gobierno del Estado de Río, para pedir "el fin de la guerra en la periferia".