SANTIAGO DE CHILE, 14 Jun. (Notimérica) -
El presidente de Chile, Sebastián Piñera, está atravesando unos meses en los que su popularidad ha caído en picado. Por ello, la renovación de seis ministerios anunciada este jueves podría estar intrínsecamente relacionada con la situación del Gobierno.
Una encuesta del Centro de Estudios Públicos (CEP) a la que ha accedido 'Telesur' revela que actualmente el mandatario cuenta con un 50 por ciento de desaprobación y tan solo el 25 por ciento de apoyo respecto a un estudio realizado en diciembre de 2018.
Estos resultados significan un aumento de 11 puntos porcentuales de desaprobación y una caída de 12 puntos porcentuales de aprobación con respecto a 2018. En relación a los motivos, los altos niveles de delincuencia, así como la mala protección de las pensiones, podrían justificar estas cifras.
En este sentido, el cambio de los ministros de Exteriores y Economía --siendo este el segundo cambio en este gabinete en lo que va de su segundo mandato-- formarían parte de esta estrategia gubernamental, que podría tener como fundamento paliar la desaprobación.
Piñera ha apostado en este intento de mejorar la imagen de su Presidencia por rostros conocidos.
Teodoro Ribera ha sido nombrado ministro de Exteriores, mientras que Juan Andrés Fontaine ha sido puesto al frente de Economía. Asimismo, Alfredo Moreno ha recibido la cartera de Obras Públicas.
Por otra parte, Sebastián Sichel ha sido designado en la cartera de Desarrollo Social y Familia, mientras que Salud ha caído en manos de Jaime Mañalich. Por último, Energía ha sido entregado a Juan Carlos Jobet, quien ocupó este cargo durante el primer mandato de Piñera al igual que Mañalich.
Por su parte, Piñera señala que con esta renovación de cargos sostiene que "quiero también ratificar mi pleno compromiso, y el de todo nuestro Gobierno, con seguir buscando con dedicación, con perseverancia, con buena voluntad los caminos del diálogo y los caminos de los acuerdos, que son los caminos más fecundos para lograr los objetivos de todos los chilenos".
Si bien a comienzos de este año el mandatario destacó como objetivos la concreción de las reformas: tributaria, laboral y de pensiones, ahora su principal meta parece ser la de refrescar su administración fijando la mirada de cara a las elecciones de 2022.