MADRID, 7 May. (Notimérica) -
Nadie está a salvo de padecer enfermedades respiratorias. Muy al contrario, el número de asmáticos va en aumento, precisamente por el tipo de salud ambiental que se vive a nivel planetario, agravado por las emisiones de los países en vías de desarrollo. Hoy, primer martes de mayo, se celebra el Día Mundial del Asma.
El asma es una enfermedad que afecta a más de 300 millones de personas en el mundo, según la Iniciativa Global para el Asma (GINA) y el 10% de estas son niños. Se trata de la enfermedad crónica más frecuente en la infancia.
Esta efeméride pretende concienciar a la población sobre las molestias que esta enfermedad produce a quien la padece y cómo conseguir una vida sana y sin limitaciones.
Actualmente, aunque no existe un tratamiento curativo total, con una adecuada educación y tratamiento se puede llevar una vida saludable y sin limitaciones. Es importante realizar el tratamiento preventivo y la técnica inhaladora correctamente, y controlar los factores de riesgo. Aunque el asma supone una carga importante para quien la padece, es posible tenerla bajo control.
Nunca es tarde para sensibilizar a toda la población de la necesidad de cuidar el medio ambiente. Es necesario mantener una calidad de aire, cada vez más limpio, cada vez más puro, cada vez más respirable.