SAN JOSÉ, 2 Abr. (Notimérica) -
El Partido Acción Ciudadana (PAC), que llegó al poder en 2014 rompiendo con el tradicional bipartidismo del PLN y el PUSC, ha logrado colocar a su candidato en la Presidencia por segunda vez. Carlos Alvarado Quesada ha ganado la segunda vuelta electoral de este domingo derrotando al candidato conservador Fabricio Alvarado con más de 60,74 por ciento de los votos.
La religión y el matrimonio homosexual han marcado estas elecciones desde el principio, dando lugar a una fuerte polarización ideológica que, a fines de 2017, dejaba a Alvarado Quesada con un índice de apoyo de una sola cifra. Posiblemente por esta razón haya sido la tercera vez en la historia democrática del país que se ha tenido que recurrir a la segunda vuelta.
Alvarado Quesada, antiguo ministro de Desarrollo Social, periodista, escritor y excantante de rock de 38 años, se ha visto salpicado por las investigaciones y acusaciones por corrupción contra su partido y el presidente Luis Guillermo Solís, lo que lo situaba a finales de 2017 con una intención de voto de tan solo el 6 por ciento.
Sin embargo, y tal y como él mismo preveía, el oficialista conseguía remontar y quedar en segundo lugar en la primera vuelta de los comicios, que finalmente se han resuelto a su favor. Tras salir victorioso ha publicado en su cuenta de Twitter un mensaje que reza: "Mi deber será unir a esta República para sacarla adelante. Una nación unida que brille entre las naciones", para lo que pretende continuar con la agenda de cambios impulsada por el hasta ahora presidente Solís.
Militante del PAC desde 2002 y con tan solo cuatro años de experiencia política en cargos públicos, Carlos Alvarado es periodista de formación y máster en Ciencias Políticas por la Universidad de Costa Rica, además del postgrado en estudios de desarrollo por la Universidad de Sussex (Reino Unido). Fue durante sus tiempos de estudiante cuando se desarrolló como vocalista y guitarrista de varias bandas de rock costarricense, como 'Por partes' o 'Dramática'.
El oficialista es, además, autor de varios libros: 'La historia de Cornelius Brown' (2006), 'Las Posesiones' (2011) y 'Temporada en Brighton' (2015). Con su obra consiguió consagrarse como ganador del premio Joven Creación de la Editorial Costa Rica en 2006.
Jefe de prensa de la bancada del PAC en la Asamblea Legislativa en el año 2004, desempeñó el cargo de asesor de campaña presidencial del candidato Ottón Solís en los comicios de 2009. Tras ello, viajó a Panamá para hacerse cargo de la gerencia de la famosa empresa multinacional estadounidense Procter & Gamble (P&G) Latinoamérica.
Llamado por el PAC nuevamente, regresó a Costa Rica para hacerse cargo como director de la campaña del presidente saliente, Luis Guillermo Solís, quien se alzó como presidente en 2014 y le otorgó el cargo de presidente ejecutivo del Instituto Mixto de Ayuda Social (IMAS), su primer cargo como funcionario nacional.
Dos años más tarde, en abril de 2016, Alvarado pasó a encabezar la cartera de Trabajo, dándose a conocer a nivel nacional. Fue desde ese cargo, del que se tuvo que apartar, desde el que en 2017 se inscribió como candidato presidencial para las elecciones de este 2018, ganando por mayoría las primarias.
"Terminamos esta maravillosa jornada electoral, convencidos de que estamos del lado correcto de la historia", escribía en Twitter el una vez finalizada la votación, agregando posteriormente, ya ganador: "Nuestra agenda de igualdad debe buscar igualdad entre hombres y mujeres, adultos mayores, personas con discapacidad y niños y niñas".
"Llevaré un gobierno para todas y todos. Que cobije a todas las personas, sin ningún distingo #EsPorCostaRica", es la promesa del nuevo presidente de Costa Rica, quien se ha amparado en una apertura social e ideológica que ha acabado por restar ventaja a su oponente, el religioso Fabricio Alvarado.
El evangélico, también periodista, ha sido durante toda la campaña un fuerte defensor de la unidad familiar tradicional y del cristianismo, algo que Alvarado Quesada ha combatido con propuestas como: alianzas con el sector público y privado; fortalecer el empleo; recaudación eficientes de impuestos; reducción del déficit fiscal; garantizar la igualdad plena a las personas LGBTI en el país y el disfrute de sus derechos; mejorar la educación y la infraestructura; crear un sistema de intermediación para capacitar y saber en donde están las necesidades; proteger la agricultura y sus trabajadores; reformar el Estado como al empleo público y al servicio civil, y anular el acuerdo 474/17 sobre la pesca de arrastre.