SAN SALVADOR, 29 Jun. (Notimérica) -
Los cuerpos del emigrante salvadoreño Óscar Martínez y de su hija Valeria, de 23 meses, quienes se ahogaron la semana pasado cuando intentaban entrar ilegalmente a Estados Unidos, serán repatriados el domingo, según indicaron fuentes diplomáticas a medios locales.
La imagen del padre y su hija abrazados sin vida en una ribera del río Bravo recorrió el mundo y describió el drama de los miles de centroamericanos que salen de sus países, huyendo de la violencia o en busca de un mejor futuro.
La familia tenía un permiso del Instituto Nacional de Migración para permanecer en México y ahí solicitar asilo en Estados Unidos, pero el desespero los llevó a intentar vadear la poderosa corriente el pasado domingo.
Miles de personas han llegado a la frontera entre EEUU y México desde octubre, cuando caravanas de ciudadanos centroamericanos dejaron sus territorios en un viaje hacia el norte huyendo de la pobreza y la violencia con la esperanza de solicitar asilo en la potencia norteamericana.
"No pongan en riesgo sus vidas, ni confíen en traficantes de personas que muchas veces no cumplen con sus promesas", exhortó el viceministro para los Salvadoreños en el Exterior, Mauricio Cabrera en una breve rueda de prensa en la terminal aérea, donde insistió en que "la migración debe ser una opción y no una obligación".