Actualizado 06/06/2015 13:57

São Paulo se prepara para el mayor desfile del Orgullo Gay del mundo

Activista gay en Brasil
Foto: REUTERS

SÃO PAULO, 6 Jun. (Notimérica) -

   La ciudad de São Paulo se prepara para celebrar este domingo el que muchos consideran el mayor desfile del Orgullo Gay del Mundo; una multitudinaria marcha que desde hace 19 años reúne a cientos de miles de personas en la céntrica avenida Paulista para reivindicar los derechos de homosexuales, lesbianas, bisexuales y transexuales.

   Este año el lema de la manifestación será "Nací así, crecí así, voy a ser siempre así: respetadme", un verso de la canción 'Modinha para Gabriela', de Dorival Caymmi, que los organizadores han escogido por su fuerte mensaje de autoafirmación.

   El desfile arrancará a primera hora de la mañana junto al Museo de Arte de São Paulo (Masp) y hasta llegar a la plaza Roosevelt habrá decenas de actuaciones en los 'trios elétricos', los grandes camiones de sonido por donde pasarán cantantes como Wanessa Camargo, Alinne Rosa y la popular 'funkeira' carioca Valesca Popozuda.

   Otro de los platos fuertes del día será la presencia de algunas de las actrices de 'Orange is the new black', la serie de Netflix sobre la vida en la cárcel de un grupo de mujeres negras y lesbianas; han confirmado presencia Natasha Lyonne, Uzo Aduba y Samira Wiley.

   El desfile de São Paulo llega justo cuando se acaba de conocer que el Estado ha sido el que más uniones homosexuales ha celebrado en los cinco primeros meses de 2015: un total de 584, el 24,5% del total de Brasil, según datos del Colegio Notarial brasileño.

   La manifestación también se producirá apenas tres días después de la multitudinaria 'Marcha por Jesús', un evento convocado por diversas iglesias evangélicas en el que se pudieron escuchar varias muestras de rechazo al matrimonio homosexual, por ejemplo.

   Además, de buen seguro habrá referencias al anuncio de televisión de Boticário, que ha encendido la polémica por incluir a parejas gays dándose abrazos. Colectivos de ultras cristianos han impulsado un boicot a la marca al considerar que despreciaba los valores de la familia tradicional, pero la campaña ha sido fuertemente contestada por el colectivo LGTB y simpatizantes.