Actualizado 30/08/2010 22:40

Un total de 32 indígenas mapuches cumplen 50 días en huelga de hambre en prisión

Indigenas mapuches chilenos se manifiestan
REUTERS


SANTIAGO, 30 Ago. (EUROPA PRESS) -

Un total de 32 indígenas mapuches que permanecen encarcelados han cumplido este lunes 50 días en huelga de hambre en protesta por la aplicación de la llamada Ley Antiterrorista que será utilizada para juzgar sus casos.

La protesta, que en un comienzo pasó inadvertida en los medios locales, ha dado un giro después de que el Instituto de Derechos Humanos del Ministerio del Interior chileno alertara la semana pasada sobre el delicado estado de salud de los mapuches que purgan sus condenas en cárceles de las localidades de Concepción, Temuco, Angol, Valdivia y Lebu.

El pasado martes, la Corte de Apelaciones de Concepción autorizó a los responsables de las cárceles a alimentar por la fuerza a los presos que se encuentran en peor estado de salud, que suman un total de ocho, decisión que ha sido duramente criticada por los activistas mapuches que anunciaron que no cumplirán con la medida.

Los 32 indígenas fueron arrestados en el marco de la Ley Antiterrorista durante diversos hechos violentos en la Región de Araucanía (centro), donde los mapuches mantienen una lucha por el reconocimiento de sus tierras. Desde el año 2009, la región permanece militarizada, hecho que también rechazan los aborígenes.

Estos mapuches se consideran presos políticos y se niegan a ser procesados a través de tribunales militares, aunque su principal exigencia al Estado chileno es que se ponga fin a la aplicación de la Ley Antiterrorista en sus causas.

La Ley Antiterrorista fue sancionada durante la dictadura del general Augusto Pinochet (1973-1990) para perseguir a sus opositores, pero los gobiernos de izquierda de la Concertación no la derogaron y la continuaron aplicando para algunos crímenes, a pesar de que la ONU ha criticado esta normativa porque discrimina a las comunidades indígenas.

El pueblo mapuche representa casi el 10 por ciento de la población chilena y sus principales asentamientos se encuentran en Araucanía, a unos 600 kilómetros al sur de Santiago. Los indígenas denuncian que en esa región tienen tierras que les pertenecen desde antes de la colonización española, las cuales, según ellos, les fueron despojadas.