Publicado 12/06/2015 23:40

El trabajo infantil, una lacra que afecta a 1,6 millones de niños en Perú

Trabajo infantil
REUTERS

UNICEF ve "buenas perspectivas" para reducirlo pero le preocupa la difícil situación de las niñas que trabajan como empleadas domésticas

MADRID, 12 Jun. (EUROPA PRESS) -

El trabajo infantil emplea a 1,6 millones de niños con edades comprendidas entre los seis y los 17 años en Perú, un país en el que la legislación permite que los menores trabajen a partir de los catorce años y en el que Gobierno está actuando en coordinación con las autoridades regionales y locales y las organizaciones sociales para poner fin a esta práctica.

Amanda Martín, especialista en Protección Infantil de UNICEF Perú, ha explicado que, según datos oficiales peruanos, hay "un 18 por ciento de niños trabajando" por "debajo de la edad legal", es decir, con edades comprendidas entre los seis y los catorce, y esa cifra "sube al 21 por ciento" entre los catorce y los 17 años, la franja del denominado "trabajo adolescente".

Hay diferentes modalidades de trabajo infantil en Perú, que van desde los niños que trabajan en tareas agrícolas ayudando a sus padres en el campo, pasando por los que se encargan del cuidado de sus hermanos y la limpieza y gestión de la casa en familias con muchos miembros, a las niñas que trabajan como empleadas domésticas en otros hogares y los menores que trabajan en las ciudades en empleos de economía sumergida.

"El trabajo infantil es un trabajo más rural que urbano, enfocado en actividades agrícolas, en el caso del contexto rural, también de ayuda a las familias o bien para comercialización. En el caso de la zona urbana, el trabajo está más enfocado a las actividades comerciales informales, como venta de productos en la calle, venta de chicles, limpieza de zapatos", ha afirmado.

Martín ha asegurado que uno de los sectores "particularmente preocupante" en el trabajo infantil en Perú por los riesgos que implica para los menores es el de las niñas que trabajan como empleadas domésticas en otros hogares porque no se puede llevar un control de su situación, están separadas de sus familias y la práctica puede llegar a derivar en una situación de explotación, violencia física e incluso violencia sexual. "Es un contexto que se presta menos a la protección y que puede estar ocultando situaciones graves de derechos que no están siendo visibilizadas", ha añadido.

Tras recordar que los niños que trabajan acumulan retrasos en su formación educativa, ha señalado que en el ámbito rural hay una "mayor proporción" de trabajo infantil en zonas amazónicas y de sierra con población indígena, siendo "en muchos casos un trabajo en el contexto de la propia familia".

EL TRABAJO INFANTIL, "LEGITIMADO SOCIALMENTE" EN EL ÁMBITO RURAL

En este sentido, ha advertido de que en el contexto rural en Perú "la mayoría del trabajo infantil" está "legitimada socialmente", en el marco de los "roles" que las familias otorgan a los niños y las niñas. "En muchos casos las niñas y también los niños tienen un rol de cuidar a sus hermanos desde muy chiquitos. Estamos hablando de niños que pueden tener diez u once hermanos, con un peso de trabajo doméstico muy fuerte que limita mucho sus posibilidades de estudio y afecta incluso a su desarrollo físico", ha señalado.

Martín ha subrayado que en el ámbito rural "no hay un entendimiento" de que el empleo de los niños en estas labores suponga "trabajo infantil" y tenga un "sesgo negativo" sino que se comprende como el reparto de tareas entre "cada miembro de la familia" en un contexto en el que se prima "el bien común".

PERÚ ESTÁ PRIORIZANDO LA ERRADICACIÓN DEL TRABAJO INFANTIL

La especialista en Protección Infantil de UNICEF Perú ha destacado que "las perspectivas son buenas" en la lucha contra el trabajo infantil porque "Perú está priorizando la disminución y la erradicación del trabajo infantil".

Perú "tiene una política nacional para la erradicación del trabajo infantil, tiene alianzas entre estado y sociedad civil, tiene varios modelos piloto puestos en marcha en este momento en diferentes contextos: rural, urbano, indígena, de selva... Para entender qué funciona para reducir el trabajo infantil", ha señalado.

Martín ha hecho hincapié en que lo que "funciona" para reducir el trabajo infantil es "una reducción drástica de la pobreza" porque el fenómeno está vinculado con la pobreza y falta de oportunidades, por un lado, y, por otro, a "la posibilidad de acceso y a la calidad y la pertinencia de la educación". "Cuando el coste de oportunidad, de lo que la educación te ofrece, no queda por encima de lo que gana trayendo dinero a la casa, entonces en ese supuesto la reacción de los padres es: ¿Para qué?", ha indicado.

LA EDUCACIÓN DE CALIDAD ES CLAVE

En este sentido, ha afirmado que "calidad de la educación" es "un tema clave" en la lucha contra el trabajo infantil pero tiene que ser una educación que a los niños permita "ampliar sus oportunidades de vida" y, además, es necesario que existan "oportunidades" laborales para los propios "cuidadores" de los menores.

La especialista en Protección Infantil de UNICEF Perú ha subrayado que existe una relación "directa" entre el trabajo infantil y el empleo precario y unas menores perspectivas de condiciones de vida, tal y como señala en su último informe la Organización Internacional del Trabajo (OIT).

"El empleo joven y precario no favorece que los adolescentes y los niños no trabajen porque si tú sabes, como papá y mamá, que el hecho de que tu hijo estudie le va a dar oportunidad de acceder a un trabajo en buenas condiciones, apuestas por eso. Si lo que ves es trabajo informal, con salarios precarios y en condiciones de protección social precarias, no te compensa", ha aseverado.

En su opinión, el trabajo infantil que es "más urgente" combatir en Perú es el que coloca a niñas como empleadas domésticas, menores que en muchos casos han realizado una "migración" de sus pueblos a la ciudad en busca de un futuro mejor y que pueden terminar sufriendo un problema de "trata" de personas o en casos de "violencia sexual".

"Es lo más urgente de abordar", ha advertido, antes de subrayar las condiciones de "especial vulnerabilidad" que padecen las niñas que trabajan como empleadas domésticas alejadas de sus familias y sin protección alguna.

Martín ha asegurado que el problema del trabajo infantil en Perú "se está reduciendo desde hace unos años" aunque de una forma "no tan rápida" como la que se pudiera esperar teniendo en cuenta que el país está afrontando una reducción de la pobreza. En este sentido, ha dicho que Perú está "priorizando" la lucha contra la pobreza y la mejora de la calidad de la educación. "A medida que eso empiece a funcionar va a haber una reducción más significativa del trabajo infantil", ha señalado.

La especialista de UNICEF ha afirmado que Perú debería poner en marcha "un análisis más fino" sobre las "modalidades de trabajo infantil" y sobre los "causas estructurales" que provocan que continúe esta práctica a pesar del desarrollo económico sostenible que tiene el país, una "agenda de investigación" sobre este fenómeno. "El reto es grande. La diversidad es mucha en Perú y el trabajo hay que abordarlo de manera diferente en cada uno de los tres contextos: de sierra, de selva y de costa", ha resumido.

Preguntada sobre si cree que se puede erradicar el trabajo infantil en Perú a medio o largo plazo, Martín ha respondido que, "sin duda", "se puede erradicar" y que no es un fenómeno "inevitable". "Sí se puede. Se puede eliminar pero, además, se puede prevenir. No es inevitable", ha explicado. "Evitemos que los niños entren al mercado laboral", ha subrayado.

"Se trata de crear el entorno que haga posible que los niños cumplan su ciclo de vida haciendo aquello que es más prioritario para ellos y no teniendo que trabajar", ha concluido la especialista en Protección Infantil de UNICEF Perú.