ROMA, 14 Mar. (EUROPA PRESS) -
"Tenemos un Papa que quiere servir", ha resuelto el jefe de la Sala de Prensa del Vaticano, el también padre jesuita Padre Federico Lombardi, para hacer completamente compatible la elección del cardenal Jorge Mario Bergoglio con el hecho de que los jesuitas son "servidores y buscan servir a la Iglesia no en condiciones de autoridad, sino en condiciones de servicio", por lo que se resisten el ser nominados obispos, cardenales.
En esta línea, Lombardi ha destacado que esta elección es "una llamada al servicio del padre Bergoglio, resultado de una llamada fuerte y no de una búsqueda de poder o de autoridad" como algunos discursos en los medios han surgido las semanas anteriores.
A su juicio, esta eleccción es una respuesta "contraria y radical" de cómo ha sido presentada la Iglesia en las semanas pasadas. En lo personal, ha reconocido estar un poco en "shock" por tener un nuevo Papa jesuita.
El jefe de la Sala de Prensa del Vaticano, el padre Federico Lombardi, que también es jesuita, ha recordado que los jesuitas tratan de ser "servidores de la Iglesia," por lo que el cardenal Jorge Mario Bergloglio, ha aceptado el Pontificado "quizá" creyendo que es "su deber servir a la Iglesia con un espíritu de gran universalidad, característica de la espiritualidad jesuita", al tiempo que ha detacado también una mirada hacia el mundo y atenta a los desafíos y las necesidades que hay.
Los cardenales han sido "valientes por "atravesar el océano" para elegir al Papa Francisco, según Lombardi, que ha confiado su alegría por que el nuevo Papa sea de América Latina, además ha resaltado la valentía por la elección de un nombre que nunca ha sido elegido antes y ha confirmado que Francisco I es el primer Pontífice de la Compañía de Jesús.
Así, el padre Lombardi ha confiado a los periodistas permanentes en la Sala de Prensa que la elección del nuevo nombre del Pontífice, Francisco, está llena de significado porque muestra un estilo de "simplicidad, testimonio evangélico", y ha destacado el verdadero testimonio de "humildad" en su primera aparición en público al pedir al pueblo que rece por él y haberse quedado en silencio antes de haber impartido él la Bendición Urbi et Orbi al pueblo.
CONTINUIDAD CON BENEDICTO XVI
Además, el portavoz vaticano ha asegurado que esta primera aparición muestra la continuidad del espíritu de Benedicto XVI porque, aunque con "una forma nueva de manifestarlo, continúa con el mismo espíritu", así como rezando junto a la gente por su predecesor, por el Papa emérito Benedicto XVI, las oraciones del pueblo de Dios del Padre Nuestro, Ave María y Gloria ha sido un acto de "pastoralidad y espiritualidad simple".
Asimismo, Lombardi ha remarcado que el nuevo Pontífice es una persona muy pastoral y lo ha demostrado con su actitud en su primera aparición que tuvo como Obispo de Roma que se relaciona con el pueblo de su diócesis.
También ha confiado en que se deberá "descubrir" al nuevo Pontífice y que no lo conoce muy bien, a pesar de ser también jesuita, y ha evocado una congregación general de los jesuitas en la que Bergoglio era el provincial argentino, mientras que Lombardi era el provincial italiano. Así, con sencillez, Lombardi ha asegurado que "no lo esperaba ver hoy vestido de blanco".
En este sentido, Lombardi ha resaltado que los jesuitas "nunca se han considerado mejores que otros" y ha confiado que le da "alegría que ha elegido el nombre de Francisco" que es un "religioso que quiere vivir el servicio de la Iglesia.