CARACAS, 27 Abr. (EP/AP) -
La Policía del municipio capitalino de Chacao detuvo ayer a un sospechoso por su relación con la explosión de un artefacto en la embajada de Bolivia en Caracas, Venezuela, que representantes del Gobierno consideraron un plan terrorista para "desestabilizar a Venezuela".
Según informó el director de la Policía política, Henry Rangel Silva, el sospechoso fue detenido por la Policía de Chacao en las inmediaciones del lugar en el que se cometió el atentado ayer.
Las mismas fuentes precisaron que el ataque con bomba no causó daños ni a la estructura del edificio diplomático ni a los alrededores del mismo, que está ubicado en el municipio de Chacao, en el este de la capital.
El jefe de la Dirección General de los Servicios de Inteligencia y Prevención (Disip) --policía política-- declaró a la Agencia Bolivariana de Noticias (ABN) que la colocación del explosivo forma parte de un plan de "desestabilización y de calentamiento de la calle que podría estarse gestando en los días siguientes". Por lo que "estamos alerta en todos los organismos de seguridad ante la repetición de eventos como éste".
Rangel Silva explicó que el incidente de la embajada de Bolivia podría estar relacionado con otros hechos similares que han ocurrido en Caracas desde febrero pasado.
Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores venezolano, Nicolás Maduro, condenó ayer el suceso, y lo atribuyó a un "enloquecimiento terrorista de un sector de la oposición".
Asimismo, señaló que el ataque a la embajada será comunicado a todas las sedes diplomáticas y los organismos multilaterales para que "se vea el ejemplo patético, concreto, de lo que es un ataque terrorista de un sector vinculado a una estrategia para desestabilizar a Venezuela".
Maduro denunció que el incidente forma parte "de lo que el Gobierno de los Estados Unidos logra con su conducta: Alentar a los grupos terroristas por la vía de la protección directa como ha pasado con Luis Posada Carriles".