Actualizado 14/06/2010 23:38

Venezuela.- CIDH expresa su "profunda preocupación" por la situación de la libertad de expresión en Venezuela


CARACAS, 14 Jun. (EUROPA PRESS) -

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) expresó este lunes su "profunda preocupación" por la situación de la libertad de expresión en Venezuela, donde en los últimos meses el Gobierno de Hugo Chávez ha tomado medidas contra periodistas como la orden de aprehensión contra el presidente de la cadena opositora Globovisión, Guillermo Zuloaga.

El comisionado de la CIDH, Paulo Sergio Pinheiro, y la relatora especial para la Libertad de Expresión de la CIDH, Catalina Botero Marino, enviaron una carta al Ministerio de Exteriores de Venezuela para solicitar información sobre los hechos ocurridos en las últimas semanas, en especial, por la orden de detención de Zuloaga, la condena penal a tres años y nueve meses de cárcel contra el periodista Francisco 'Pancho' Pérez por haber publicado una denuncia de corrupción y por el atentado con bombas molotov contra la Cadena Capriles.

En la misiva, el comisionado y la relatora "manifestaron su profunda preocupación" por la condena contra Pérez y aseguraron que esto es una muestra de la "evidente desproporción de la condena impuesta al periodista por la publicación de una denuncia de claro interés público, muestra la grave desprotección en la que se encuentra la libertad de expresión en Venezuela".

Sobre el caso de Zuloaga y su hijo, ambos acusados de usura genérica y agavillamiento por haber almacenado 24 vehículos en una finca de su propiedad, la CIDH recordó que los periodistas y propietarios de Globovisión "han sido sometidos a constantes estigmatizaciones y amenazas por parte de los más altos funcionarios públicos, así como a ataques privados provenientes de grupos afines al Gobierno" de Chávez.

La comisión aclara que "la persecución penal por delitos no vinculados con el ejercicio de la libertad de expresión puede configurar una violación de dicho derecho si se demuestra que la investigación está motivada por la posición política del imputado o por el ejercicio de su derecho a la libertad de expresión".

Asimismo, lamentó "la ausencia de investigaciones y sanciones ejemplares" ante las "graves y constantes agresiones sufridas por medios y periodistas" en esa nación sudamericana "por la simple razón de su línea editorial o cubrimiento noticioso".

En este sentido, mencionó como los "puntos más débiles" de la democracia venezolana la "cada vez mayor intolerancia del Ejecutivo a las críticas y a la disidencia y la falta de independencia y autonomía del Poder Judicial frente al poder político", porque éste último "ha permitido que en Venezuela se utilice el poder punitivo del Estado para criminalizar a los defensores de Derechos Humanos y la protesta social pacífica, y perseguir penalmente a los críticos o disidentes políticos".

Por último, la CIDH pide al Estado venezolano "evitar el uso de medios directos o indirectos para silenciar las opiniones críticas o las denuncias que se produzcan contra autoridades del Gobierno, por inquietantes u ofensivas que las mismas resulten".