Actualizado 17/07/2012 20:25

Venezuela.- HRW alerta de que el alto poder que concentra Chávez supone un perjuicio para los DDHH y las libertades


CARACAS, 17 Jul. (EUROPA PRESS) -

El alto poder que concentra el Gobierno de Hugo Chávez supone un perjuicio para los Derechos Humanos y las libertades fundamentales de los venezolanos, poniendo en riesgo la democracia y el libre ejercicio de los periodistas, jueces y activistas, ha advertido Human Rights Watch (HRW).

En su informe 'Concentración y Abuso de Poder en la Venezuela de Chávez' presentado este martes, HRW asegura que "el deterioro de las garantías de Derechos Humanos" han permitido al Gobierno "intimidar, censurar e iniciar acciones penales contra críticos de su gestión y contra aquellos que considera opositores".

"Durante años, el presidente Chávez y sus partidarios han venido construyendo un sistema que le da vía libre al gobierno para amenazar y castigar a los venezolanos que interfieran en su agenda política", ha denunciado José Miguel Vivanco, director para las Américas de HRW.

La organización reconoce que, a pesar de las intimidaciones, muchos venezolanos continúan criticando al actual sistema, sin embargo, "la idea de tener que enfrentar represalias similares ha socavado la capacidad de los jueces de decidir con independencia casos políticamente sensibles" cuando se trata de importantes opositores.

Como ejemplo, HRW menciona que en el año 2010 --cuando Chávez controlaba el Parlamento y antes de que la oposición retomara sus escaños tras haber ganado en los comicios legislativos-- los diputados reformaron una ley que regula el proceso de designación de magistrados del Tribunal Supremo de Justicia, lo que permitió al Ejecutivo introducir jueces afines.

En los últimos años, la actuación del Tribunal Supremo de Justicia "se ha deteriorado notablemente, ya que sus miembros han rechazado abiertamente el principio de separación de poderes y han expresado públicamente su compromiso con promover la agenda política del presidente Chávez", denuncia HRW.

El supuesto compromiso político asumido por los magistrados se refleja en sus sentencias, las cuales, en "reiteradas ocasiones", han "validado la indiferencia del gobierno frente a sus obligaciones jurídicas internacionales de Derechos Humanos".

Pero además, recuerda HRW, Chávez ha rechazado públicamente la autoridad y las competencias de la Corte Interamericana de Derechos Humanos y de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, considerados los mecanismos externos más importantes para procurar reparar abusos ante la inacción de los tribunales nacionales.

LIBERTAD DE PRENSA

Chávez "ha utilizado sus facultades regulatorias para ampliar la cantidad de medios de comunicación estatales y favorables al gobierno", pero también para emitir largos discursos en medios privados que interrumpen la programación habitual sin dar otra opción a los venezolanos.

HRW recuerda que hace dos años el Parlamento --controlado por el 'chavismo'-- hizo importantes cambios legales para que las restricciones existentes a la libertad de expresión se apliquen también a Internet, al tiempo que incluyó nuevas prohibiciones en los mensajes que emiten los telediarios.

A su vez, ha adoptado "medidas agresivas para reducir la disponibilidad de medios de comunicación que ofrecen una programación crítica del gobierno", aplicando además sanciones o censurando a aquellos que tengan una postura crítica en temas como la escasez de agua, la crisis carcelaria o los seísmos.

HRW señala que, si bien todavía es "habitual" que algunos medios privados critiquen al Ejecutivo, también es cierto que "el temor a sufrir represalias por parte del gobierno ha llevado a que la autocensura se convierta en un serio problema" en Venezuela.

DEFENSORES DE DDHH

Otro de los aspectos que preocupa a HRW tiene que ver con los activistas de Derechos Humanos y los esfuerzos emprendidos por Chávez para desacreditarles mediante acusaciones de supuestas conspiraciones con el apoyo de Estados Unidos.

Si bien es cierto que algunas ONG han recibido dinero de fuentes estadounidenses --una "práctica común" entre las organizaciones independientes-- HRW aclara que "no existen pruebas creíbles de que la independencia y la integridad de su trabajo a favor de los Derechos Humanos en Venezuela se hayan visto comprometidas".

Algunas ONG han afrontado acciones penales promovidas desde el Gobierno porque el Tribunal Supremo de Justicia determinó que las organizaciones que reciban financiación extranjera podrían ser acusadas de "traición".

La combinación de una serie de medidas adoptadas "ha aumentado significativamente la capacidad del gobierno para impedir o disuadir a los defensores de Derechos Humanos" obtener financiación y hasta lograr la legitimidad pública que necesitan para actuar de manera efectiva.

"Lamentablemente, dada la reacción del presidente Chávez ante recomendaciones similares en el pasado, es muy poco probable que adopte medidas para reinstaurar los mecanismos de control del poder presidencial que él mismo y sus seguidores eliminaron", ha advertido Vivanco.

Así, HRW recuerda que cuando dio a conocer hace cuatro años su último informe sobre Venezuela, la respuesta de Chávez fue detener a algunos representantes de esta reconocida ONG y expulsarles de esa nación sudamericana.