Actualizado 03/07/2013 17:17

Melamed, atleta con discapacidad motora: "Todos somos grandes, pero podemos ser grandiosos"

Maickel Melamed, deportista venezolano
VBC

Afirma que la crisis actual puede servir para "destruir categorías" entre los seres humanos


CARACAS, 3 Jul. (EUROPA PRESS) -

Desde que Maickel Melamed, atleta venezolano, deportista extremo y psicoterapeuta, fue diagnosticado con un "retraso motor" cuando nació, no ha parado de superarse a sí mismo y de trabajar para lograr que su historia sirva a los demás como ejemplo, utilizando su plataforma 'Vamos', que intenta inspirar y demostrar que "todos somos grandes, pero podemos ser grandiosos".

Maickel Melamed tiene una vida ajetreada porque no sólo desempeña labores educacionales para alto rendimiento, sino que cree que hay que demostrar con los actos lo que se predica con las palabras. "Comenzamos a hacer maratones porque creemos que es algo que va más allá de las posibilidades del común de los seres humanos".

Los que parecía imposible se convirtió en habitual, y Melamed lleva ya dos maratones y afirma que va "a por los cinco grandes del mundo", después de incluso haber subido los 5.000 metros del pico Bolívar, el más alto de Venezuela.

Positivo nato, trabaja mucho y entrena más de 35 horas semanales, para poder participar en maratones de hasta 15 horas. Por ello rechaza que se encasille a las personas que tienen alguna discapacidad, ya que opina que "cuando queremos pensar en grande, las categorías se quedan pequeñas", y que "todos entramos dentro del género de los seres humanos", que todavía tienen que demostrar si desempeñan un buen papel en este planeta.

CRISIS PUEDE DESTRUIR CATEGORÍAS

Y para destruir categorías, Melamed opina que lo mejor es la crisis, la cual parece agradecer, porque "estamos en un momento donde el mundo está girando y le podemos dar el giro que queramos". Según el deportista, dentro de 20 años podremos decir "aproveché mi vida en un momento en el que podía cambiar el mundo, o la desperdicié".

Melamed recuerda que ha tenido momentos duros como cuando se fue a vivir solo a Londres, para "comerse el mundo" y la situación le superó porque "hacía mucho frío y el clima me dejaba paralizado", explica, hasta que un día un niño muy pequeño le dirigió una sonrisa y empezó a reflexionar sobre "a cuántas personas le podemos cambiar la vida con gestos sencillos".

Hay otro episodio que marcó sin duda a Maickel Melamed, que fue la pérdida de "su gran amigo" José Antonio Delgado, un alpinista que murió en una montaña de Pakistán a 8.000 metros de altura, y que le enseñó a "no tenerle miedo a morir, sino a tener miedo a no vivir cada día".

"Hay poca gente que ha apostado por mí, pero esa es la gente que vale", confiesa el deportista, que tiene como meta principal conseguir "que los sueños de los demás se hagan realidad" porque es lo único que puede hacer que "su historia se haga completa".