(Agrega detalles, contexto)
Por Marianna Párraga
HOUSTON, 30 ene, 30 Ene. (Reuters/EP) -
- Amuay, la mayor refinería de Venezuela, incrementó su operatividad a 59 por ciento de su capacidad de 645.000 barriles por día (bpd), desde un 42 por ciento hace tres semanas, tras reiniciar una de las dos unidades de destilación de crudo que estaban detenidas, según un documento interno de PDVSA al que accedió Reuters.
Varias paradas imprevistas en enero obligaron a la petrolera estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) a reducir su oferta de combustible de aviación al mercado abierto, pero la compañía esta semana lanzó dos licitaciones para vender hasta 720.000 barriles a ser embarcados desde Venezuela y Curazao.
También está ofreciendo entre uno y dos cargamentos de diésel ultra bajo en azufre (ULSD) desde su refinería de Puerto la Cruz, después de años de dedicar toda la producción de este combustible al creciente mercado interno, el cual ha estado cambiando su red eléctrica a un mayor uso de plantas térmicas.
La destiladora de crudo (CDU) número 4 de Amuay está procesando 88.400 bpd después de estar fuera de servicio por varios meses por un mantenimiento planeado.
Mientras que la CDU número 3, que fue detenida a finales de diciembre después de un incendio, está todavía fuera de servicio a la espera de reparaciones de algunos equipos, detalló el informe. Las otras tres destiladoras de la refinería están funcionando con normalidad, agregó.
Pero el flexicoquer de 72.000 bpd, detenido por PDVSA a principios de enero después de problemas con un compresor, se encuentra todavía en mantenimiento. Amuay tenía seis de sus 45 unidades operacionales fuera de servicio para el 28 de enero, de acuerdo al documento de PDVSA.
La vecina refinería de Cardón, de 310.000 barriles por día, incrementó también su procesamiento a un 93 por ciento de capacidad, desde un 86 por ciento de comienzos de enero, pero una de sus unidades de alquilación sigue paralizada, precisó.
Con las refinerías más grandes incrementando operaciones, el Centro de Refinación Paraguaná (CRP) que incluye tres plantas en la costa occidental de Venezuela, entre ellas Amuay y Cardón, operaba a un 70 por ciento de capacidad. La refinería Bajo Grande de 16.000 bpd está detenida.
La refinería El Palito, de 146.000 bpd de capacidad, también detuvo su craqueador catalítico este mes para reparaciones menores después de una fuga, pero ya fue restablecido.
PDVSA está intentando comprar en el mercado abierto un cargamento de 300.000 barriles de gasolina sin plomo de 95 octanos con un máximo de 600 partes por millón de azufre para ser recibido entre el 1 y el 10 de febrero en cualquier puerto venezolano, con el fin de compensar las pérdidas por las paradas no programadas en El Palito y CRP, dijo un operador cercano a la transacción.
Pero la firma no ha encontrado un proveedor que pueda darle los suministros bajo los términos exigidos, agregó la fuente.
Venezuela el año pasado importó unos 80.000 bpd de productos refinados desde Estados Unidos, según la Administración de Información de Energía, aproximadamente el mismo volumen que compró en el 2012 después de una severa explosión que causó daños en Amuay y dejó más de 40 muertos.
(Por Marianna Parraga; Editado por Javier López de Lérida y Silene Ramírez)