Actualizado 05/04/2014 21:32

Capriles aboga por una protesta pacífica en Venezuela

Henrique Capriles
Foto: STRINGER VENEZUELA / REUTERS

CARACAS, 5 Abr. (Notimérica/EP) -

   El líder de la Mesa de Unidad Democrática (MUD), Henrique Capriles, ha reiterado este sábado su llamamiento a seguir manifestándose contra el Gobierno de Nicolás Maduro, subrayando que la protesta debe ser pacífica "para que no oculten los graves problemas que hay en Venezuela".

   "Apoyamos la protesta pacífica que permita que no oculten los graves problemas que hay. ¡Que siga nuestro pueblo reclamando respeto a sus derechos! No hay respuesta (del) Gobierno y los problemas nos unen a todos", ha escrito en su página de la red social Facebook.

   No obstante, ha advertido de que "el descontento, especialmente en los barrios, no se traduce automáticamente en apoyo, sino que el apoyo hay que ganarlo con propuestas". "Busquemos el apoyo de la gente", ha instado a los suyos.

   Para ello, ha propuesto comenzar por los barrios. "Allí es donde tenemos que sumar y sumar. Allí es donde hay más problemas. ¿Quién explica sobre nuestro proyecto de país? ¿Quién informa sobre la verdad de lo que pasa? Allí estamos nosotros", ha dicho.

   El también gobernador del estado de Miranda se ha mostrado convencido de que "para cambiar hay que sumar y unir todos los sectores". "Las encuestas muestran que el país rechaza ya en un 60 por ciento a Maduro. Hay miles de razones para protestar", ha concluido.

CRISIS VENEZOLANA

   La crisis política en Venezuela estalló el pasado 12 de febrero, cuando arrancaron las protestas antigubernamentales y la represión de las mismas por parte de las fuerzas de seguridad y de civiles armados, lo que ha dejado al menos 39 muertos, 608 heridos y 192 detenidos.

   Desde entonces, opositores y oficialistas han marchado a diario para repudiar las acciones del contrario y llamar a un diálogo que aún no se ha producido porque la oposición exige antes la liberación de los detenidos, el desarme de los grupos pro gubernamentales y el fin de la represión.

   La inestabilidad de Venezuela ha llevado a sus vecinos regionales a reunirse para buscar una solución. La Organización de Estados Americanos (OEA) se ha limitado a hacer un llamamiento al diálogo, a pesar de que Panamá había solicitado medidas efectivas, lo que ha llevado a Venezuela a romper las relaciones bilaterales.

   La Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR) fue un paso más allá, expresando su respaldo al Gobierno de Maduro y anunciando la creación de una comisión conformada por los ministros de Exteriores del bloque regional para acompañar el diálogo en el marco de la Conferencia Nacional por la Paz.

   Los cancilleres regionales han conseguido que Gobierno y oposición acepten sentarse a la mesa de negociaciones con la mediación de "un tercero de buena fe" de mutuo acuerdo para superar, de una vez por todas, esta crisis política.