Actualizado 07/02/2008 20:33

Venezuela.- El gobernador de Zulia dice que Venezuela necesita un presidente "serio" ya que Chávez es "un energúmeno"


CARACAS, 7 Feb. (EUROPA PRESS) -

El gobernador del Estado de Zulia y ex candidato a la Presidencia de Venezuela, Manuel Rosales, consideró hoy que el país necesita un presidente "serio" y calificó como una "barbaridad" que el mandatario, Hugo Chávez, declarara que Venezuela limita con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en vez de con Colombia.

"El pueblo está entendiendo que Venezuela necesita un presidente serio que se dedique a gobernar", declaró Rosales, que aseguró que Chávez "se comporta como un energúmeno".

"Es una irresponsabilidad y una manera violenta de expresarse. Con un desconocimiento de las relaciones que hemos tenido siempre con el pueblo y con el gobierno colombiano. No es un problema de hombres y de gobiernos, es un problema histórico e institucional", manifestó.

El gobernador opositor estimó que la inmensa mayoría del país no quiere violencia ni distanciamiento entre Colombia y Venezuela, sino solucionar los problemas entre ambos.

Rosales dijo que Chávez "no se dedica a gobernar" y que los venezolanos tenían la esperanza de que tras el referéndum sobre la reforma constitucional que éste perdió el pasado mes de diciembre el mandatario "se dedicaría a esto". Sin embargo, agregó que el presidente continúa en lo que definió como una "política violenta de división y de guerra permanente".

Según informa la prensa venezolana, Rosales añadió también que las relaciones bilaterales con determinados países, entre los que destacó a Estados Unidos, han empeorado por una política nacional que calificó de "hipócrita" ya que se habla "mal del imperio y le compramos casi todo al imperio".

"El presidente Chávez se comporta como un energúmeno. De manera prepotente arremete, sigue diciendo y crea cercos de violencia y creando enemistades innecesarias con países hermanos con Perú y Colombia", insistió.

Por último agregó que el mandatario está acabando con la economía nacional así como con sus valores, su historia y con la vida de los venezolanos y que en su estrategia internacional busca convertirse en "adalid de la política" de América Latina mientras que "no ha sido capaz" de crear mecanismos para asegurar al pueblo el acceso a medicinas ni alimentos.