Actualizado 30/03/2014 18:15

López se niega a dialogar con el Gobierno sin unas "condiciones mínimas"

El líder de Voluntad Popular, Leopoldo López, antes de entregarse a la Policía.
Foto: REUTERS

CARACAS, 30 Mar. (Notimérica/EP) -

   El líder del partido político Voluntad Popular (VP), Leopoldo López, ha expresado su negativa a dialogar con el Gobierno venezolano sin unas "condiciones mínimas", en contra de lo acordado por la Mesa de Unidad Democrática (MUD) con el Ejecutivo de Nicolás Maduro.

   A través de su cuenta oficial en la red social Twitter, ha considerado que "sin la garantía de las condiciones mínimas propuestas por la MUD y por los estudiantes es muy difícil avanzar con el diálogo".

   López ha recordado que "las condiciones mínimas para dialogar" que hasta ahora había planteado la coalición opositora son "libertad para los presos políticos y justicia para los fallecidos y torturados" durante las protestas.

   "Mientras estemos en dictadura, me tendrán en (la cárcel militar de) Ramo Verde, pero deben ser liberados todos los estudiantes, todos los alcaldes y (el autodenominado preso político Iván) Simonovis", ha indicado.

   "¿Cómo pretende el Gobierno tener dialogo cuando los asesinos del 12-F eran escoltas del ministro de Interior, Justicia y Paz, Miguel Rodríguez Torres, y nadie le ha pedido explicaciones?", ha cuestionado.

   De la misma forma, el ex alcalde de Chacao ha planteado "cómo dialogar cuando el asesino de Adriana Urquiola trabajaba en un ministerio y fue liberado sospechosamente sin que nadie haya dado explicaciones".

   "¿Cómo dialogar si a Génesis Carmona la asesinan luego de que (el gobernador del estado de Carabobo, Francisco) Ameliach, ordena a los colectivos (grupos de choque pro gubernamentales) y nadie cita a este criminal a declarar?", ha añadido.

   Con todo ello, ha considerado que "está claro que la violencia ha sido planificada y promovida por el régimen". "Allí estén las pruebas y los testimonios", ha señalado, en alusión a las numerosas fotografías y vídeos que circulan por las redes sociales.

   Así, el líder opositor ha reiterado que "está determinado a quebrar esta dictadura", por lo que ha aclarado que no avalará "nada que la legitime". "Ese es nuestro compromiso: El que se cansa pierde", ha zanjado.

DIÁLOGO POLÍTICO

   De esta forma, López se ha mostrado en contra del diálogo al que la MUD y el Gobierno parecen encaminarse, después de que ambos aceptaran la propuesta de la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR) para sentarse a la mesa de negociaciones con un mediador.

   De momento, se desconoce quién ejercerá de "tercero de buena fe", aunque, según el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, el Gobierno de Maduro habría encargado a un grupo de tres países organizar el diálogo.

   De acuerdo con fuentes diplomáticas consultadas por el diario venezolano 'El Universal', serían el canciller de Brasil, Luiz Alberto Figueiredo, el de Ecuador, Ricardo Patiño, y la de Colombia, María Ángela Holguín.

   Parece que el diálogo podría materializarse, después de los numerosos llamamientos que el Gobierno ha realizado a la oposición y que ésta ha rechazado exigiendo como requisitos previos el fin de la represión de las protestas, la liberación de los detenidos en las mismas y el desarme de los grupos de civiles cercanos al oficialismo.

RECLUIDO EN RAMO VERDE

   López, uno de los líderes más destacados de la oposición venezolana, fue señalado por el Ejecutivo como "autor intelectual" de la ola de violencia que se desató a raíz de la convocatoria que realizó para marchar en Caracas contra el Gobierno de Maduro.

   Después de una semana de inestabilidad, en la que se rumoreó que incluso podía haber huido de Venezuela, López se entregó a las autoridades encabezando una manifestación opositora que desembocó en la sede del Ministerio de Justicia, Interior y Paz.

   Desde el pasado 18 de febrero, el jefe de VP está recluido en la cárcel militar de Ramo Verde, cerca de Caracas, acusado de cuatro delitos --incendio intencional, instigación pública, daños a la propiedad y asociación para delinquir--, por los que podría ser condenado a hasta diez años de prisión.

   Su defensa presentó un recurso para conseguir su excarcelación, pero la Corte de Apelaciones de Caracas lo rechazó el pasado viernes, confirmando su estancia en Ramo Verde por los delitos anteriormente citados.

CRISIS VENEZOLANA

   La crisis política en Venezuela se desató el pasado 12 de febrero, cuando arrancaron las protestas antigubernamentales y la represión de las mismas por parte de las fuerzas de seguridad y de civiles armados, lo que ha dejado 39 muertos, 559 heridos y 168 detenidos.

   Desde entonces, opositores y oficialistas han marchado a diario para repudiar las acciones del contrario y llamar a un diálogo que aún no se ha producido porque la oposición exige antes la liberación de los detenidos, el desarme de los grupos pro gubernamentales y el fin de la represión.

   La inestabilidad de Venezuela ha llevado a sus vecinos regionales a reunirse para buscar una solución. La Organización de Estados Americanos (OEA) se ha limitado a hacer un llamamiento al diálogo, a pesar de que Panamá había solicitado medidas efectivas, lo que ha llevado a Venezuela a romper las relaciones bilaterales.

   UNASUR fue un paso más allá, expresando su respaldo al Gobierno de Maduro y anunciando la creación de una comisión conformada por los ministros de Exteriores del bloque regional para acompañar el diálogo en el marco de la Conferencia Nacional por la Paz.

   Los cancilleres regionales han conseguido que Gobierno y oposición acepten sentarse a la mesa de negociaciones con la mediación de "un tercero de buena fe" de mutuo acuerdo para superar, de una vez por todas, esta crisis política.