Publicado 06/03/2014 22:46

La MUD acusa a Maduro de "sembrar las semillas de una guerra civil" en Venezuela

El secretario general de la MUD, Ramón Guillermo Aveledo.
REUTERS

CARACAS, 6 Mar. (EUROPA PRESS) -

El secretario ejecutivo de la Mesa de Unidad Democrática (MUD), Ramón Guillermo Aveledo, ha acusado este jueves al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, de "sembrar las semillas de una guerra civil" por llamar a los grupos armados a enfrentar a los manifestantes.

Aveledo ha criticado el discurso pronunciado ayer por Maduro, en el marco de los actos de homenaje a su antecesor en el cargo, Hugo Chávez, cuando "ordenó a colectivos (grupos de choque pro gubernamentales) consejos comunales y organizaciones de campesinos a disolver las 'guarimbas' (pandillas callejeras)".

"A su vez, resaltó que la consigna dictada en cadena nacional de 'candelita que se prenda, candelita que se apaga' es imposible desvincularla del feroz ataque desatado ese mismo día contra manifestantes, vecinos y sus propiedades", ha recordado.

El jefe de la MUD ha considerado que se trata de "una respuesta irracional". "Es de extrema gravedad porque se trata de la evidencia de una política gubernamental de someter a la población mediante el terror y de estimular el enfrentamiento entre venezolanos", ha denunciado.

Aveledo ha advertido de "lo que puede ocurrir en choques armados entre compatriotas al pretender desmovilizar a los ciudadanos mediante el terror". "Lo que puede ocurrir es que se estén sembrando, con pasmosa irresponsabilidad, las semillas de la guerra civil", ha alertado.

Así, ha instado a "detener la escalada de insensatez antes de que sea demasiado tarde". "Si se le ocurre al gobierno que pisando el acelerador de la intolerancia y la violencia es como va a controlar la situación, hay que advertirle de que la puerta que están abriendo es a la agudización, extensión y profundización de la crisis", ha dicho.

La crisis política en Venezuelase desató el pasado 12 de febrero, cuando arrancaron las protestas antigubernamentales y la represión de las mismas por parte de las fuerzas de seguridad y de civiles armados, lo que ha dejado al menos 50 muertos y cientos de heridos y detenidos.