Actualizado 28/02/2014 17:25

Venezuela.- Vecchio denuncia que la orden de captura emitida en su contra "es política"

CARACAS, 28 Feb. (EUROPA PRESS) -

El líder del partido político opositor Voluntad Popular (VP), Carlos Vecchio, ha denunciado este viernes que la orden de captura emitida hoy en su contra por su supuesta implicación en la ola de violencia que se ha desatado en Venezuela "es política".

"La orden de captura es política. No hay ninguna prueba en mi contra. Aplican el terrorismo judicial en mi contra", ha escrito en su cuenta oficial en la red social Twitter.

Vecchio ha considerado que "el acoso judicial es evidente". "Pensar distinto es un delito en el país", ha afirmado, subrayando que ello "demuestra el talante totalitario del Gobierno".

Así, ha cuestionado el supuesto acercamiento del Ejecutivo. "Con el encarcelamiento de Leopoldo (López), la persecución a VP y la represión a los estudiantes ¿Cómo se puede hablar de paz y diálogo cuando se reprime y se persigue a la disidencia?", ha preguntado.

En este contexto, ha reafirmado la decisión de VP de seguir con las protestas. "Gracias infinitas por las muestras de solidaridad. La lucha de uno es la lucha de todos. Estamos del lado correcto de la historia", ha dicho.

La justicia venezolana también ha ordenado arrestar al líder de VP Antonio Rivero y ha amenazado con acciones similares a los alcaldes opositores David Smolansky (El Hatillo) y Daniel Ceballos (San Cristóbal) y al diputado opositor de Zulia Lester Toledo.

López, el máximo dirigente de VP, está recluido en Ranmo Verde, una prisión militar cercana a Caracas, como "autor intelectual" de los disturbios que se produjeron el pasado 12 de febrero en la capital venezolana.

VP ha denunciado que el Gobierno de Nicolás Maduro ha iniciado "una arremetida de persecución política y criminalización en su contra, que ha incluido tres allanamientos y robo de equipos a la sede nacional del partido".

La crisis política en Venezuela se desató el 12 de febrero, cuando arrancaron las protestas antigubernamentales y la represión de las mismas por parte de las fuerzas de seguridad y de civiles armados, lo que ha dejado al menos 50 muertos y cientos de heridos y detenidos.