"En Venezuela ir a un concierto de clásica es como ir a uno de rock, las entradas se agotan al momento", asegura
MADRID, 14 May. (EUROPA PRESS) -
El joven director de orquesta venezolano Gustavo Dudamel debutará el próximo jueves con la Orquesta Nacional de España (ONE) en el Auditorio Nacional con un programa dedicado a Beethoven ('Concierto para violín en Re mayor, opus 61') y Prokofiev ('Sinfonía nº 5') que podrá escucharse también el viernes y el sábado. A sus 27 años, está considerado una de las grandes promesas de la dirección musical y además de dirigir la Orquesta Juvenil Simón Bolívar, recientemente ha sido nombrado titular de la Filarmónica de Los Ángeles.
Dudamel, que mantuvo hoy un encuentro con los medios de comunicación, explicó la importancia que ha tenido a lo largo de su carrera el Sistema de Orquestas Infantiles y Juveniles de Venezuela, un proyecto liderado por el maestro José Antonio Abreu, en el que Gustavo Dudamel ha crecido, musicalmente hablando, y que tiene como horizonte llevar al mundo de la música a un millón de niños y jóvenes.
"Soy un producto del Sistema --como se conoce popularmente--. Lo considero mi familia, mi casa, mi razón de vida y todo lo que soy se lo debo a él. Siempre estaré ahí", aseguró el joven maestro quien adelantó que en su mente no figura, en absoluto, marcharse de Venezuela.
ENTRADAS AGOTADAS.
A diferencia de otros países, donde la música clásica está considerada de gente adulta, en Venezuela ocurre lo contrario, es "sumamente accesible", afirmó Dudamel. "Ir a un concierto de clásica es como ir a uno de pop o rock, las entradas se agotan al momento", señaló.
Esto, en su opinión, sucede porque en su país están "creando público, una audiencia culta con músicos jóvenes". Y para ellos, "llegar a la Bolívar es un sueño", aseguró. "Cada vez hay más niños involucrados en este proyecto. Es una lucha por la música clásica como vía para el cambio social", explicó. "Además cada vez que se toca algo se ve como nuevo, aunque se trate de Beethoven o Tchaikovsky. Eso son retos bellísimos", manifestó.
Dudamel añadió que si hoy las grandes orquestas se han alejado del público y han perdido a los jóvenes ha sido debido a ellas mismas. "La interacción con el público es el único camino de salvación de una nueva generación y de la música clásica en general", pronosticó. "Las nuevas generaciones debemos hacer una llamada clara a los jóvenes y asegurarles que podemos hacer fiesta no sólo con el rock sino también con la música clásica", añadió.
A este respecto confesó que él mismo disfruta con el pop o la salsa y le encantan los veteranos Queen o Pink Floyd pero a la vez se apasiona al escuchar unas sonatas de Bach o Mozart. Recordó además que este último hacía en su tiempo "música popular". "Si Mozart viviese hoy sería, quizás, un compositor de pop", afirmó.
UNA ORQUESTA "CON ESPÍRITU".
Respecto a la ONE, Dudamel dijo que se ha encontrado con una orquesta con "mucho espíritu" y "muy dispuesta" y auguró un "concierto especial" en el Auditorio Nacional.
Aunque ligado a los jóvenes músicos, Gustavo Dudamel afirmó que no hace distinciones entre dirigir a éstos o a profesores con más edad. "Procuro sacar todo el jugo al espíritu que llevan dentro, eso es lo principal porque la música, además de brindar sonido, es sensibilidad", dijo.
Preguntado por el repertorio contemporáneo, el director venezolano declaró ser de la opinión de que dar su propio espacio a los nuevos compositores, aunque reconoció que hay música moderna "poco accesible". "Tenemos que hacer que la música contemporánea suene importante para nosotros", aclaró.
El nuevo álbum de Dudamel al frente de Simón Bolívar, 'Fiesta', acaba de salir al mercado bajo el sello Deutsche Grammophon y está dedicado al repertorio iberoamericano con especial atención a autores venezolanos. "Es un repertorio serio pero con espíritu de melodía muy latino y supone nuestra carta de presentación, una referencia, un registro para el tiempo", afirmó.